
Siento a la luna espiando
la canción que acabamos de interpretar
con coro de estrellas de fondo
y un rió orquestando nuestro tempo
difícil de igualar.
Un lucero nos indica
la cercanía del dorado
que hará un detente
en nuestro tiempo
para llevarnos de vuelta
a la realidad.
En mis brazos tiemblas
por lo difícil de la situación
en donde tú pones una lágrima
y yo desperdicie un corazón.
Así es la vida
sin marcha hacia atrás
porque de poder hacerlo
años atrás te comenzaba
de entre la gente buscar.
Núm-20